DELINCUENTES Y POLITICA UNIDAS NUEVAMENTE

Como podemos observar en las fotos publicadas por el diario critica
las dos barras bravas (grupo de delincuentes que usan al futbol y sus estructuras sociales para su propio provecho) lucieron banderas contra el grupo clarin, dueño de la señal satelital de futbol codificado y del canal TyC Sports. Generalmente en este blog estuve y estare en contra de cualquier monopolio, donde la informacion y el acceso a la misma, este vedada para unos pocos argentinos (alrededor del 25%). Pero tampoco estoy de acuerdo de la utilizacion politica que se hace sistematicamente con nuestro futbol.
Sabemos del mal endemico que destruye al futbol nacional, con las autodenominadas barras bravas, y su nexo con la politica siempre estuvo sospechado, nunca del todo comprobado, por miedo a represalias o simplemente porque no conviene al negocio. Hoy ese nexo es mas que evidente, ya que el gobierno nacional, en acuerdo con estas organizaciones delictivas, pacto con ellos la portacion de banderas "a favor" de la nueva ley de radiodifusion, que se tratara en el congreso nacional proximamente. Y como uno de los rivales directos de la administracion de los Kirchner es el grupo Clarin, fue notorio que las dos barras, las de River y Boca, mostraran una coincidencia inedita en una cuestion que es materia de opinion publica, pero que a la verdad de las cosas, no incide mucho en los intereses de estos delincuentes que se amparan en los colores de las dos maximas instituciones de nuestro futbol.
Llama la atencion no haber escuchado un solo cantico a favor de la nueva ley. Llama la atencion que estuviera todo tan organizado.
Es un nuevo intento del gobierno nacional para ganar votos de cara a la proxima eleccion.
Aca, en esta editorial, no estoy discutiendo la validez o no de la nueva ley de radiodifusion, la cual queda para que el congreso nacional la promulgue, la vete o la modifique segun sus facultades constitucionales. Aca, en esta editorial, solo pongo de manifiesto la terrible convivencia entre la politica y estas organizaciones delictivas que infestan nuestro futbol.
Y asi podria enumerar tantos nexos: barras de Racing Club trabajando en el Gobierno del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. Barras de Estudiantes como custodios del Gobernador Daniel Scioli. Barras de Chacarita Juniors como grupo de choque en el sindicato gastronomico. Barras de otros tantos clubes que estan en la politica, como punteros, como custodias, como organizadores de movilizaciones. Barras amigos de jueces, abogados, fiscales, comisarios. Barras que comercian drogas (ligados algunos al cartel de Juarez que ya hizo pie en Argentina). Barras que son informantes de los medios periodisticos nacionales como paradojicamente Ole deportivo. En fin, muchos nexos para cortar...

Con la verdad no temo ni ofendo.

Joaquin del arse.

Publico Clarin deportivo.
Reclamos en ambas populares contra el Grupo Clarín. Llamó la atención lo que sucedió en algunos pasajes del Superclásico de ayer en la Bombonera. En una y otra tribuna aparecieron banderas contra el Grupo Clarín. Fue un hecho que dio la impresión de estar perfectamente organizado y hasta pareció haber sido debidamente sincronizado. poEn la pular de Boca que da hacia Casa Amarilla, pudo verse una bandera con los colores azul y amarillo que decía "Clarín, queremos fútbol gratis por TV". Pero lo que sorprendió más aún fue cuando, paralelamente del otro lado, en la bandeja que ocupaban los 4.500 hinchas de River sobre la tribuna alta que da al Riachuelo, se desplegó una bandera que ocupaba casi toda la cabecera. Decía, en letras negras sobre los colores de River, "Clarín, el fútbol es una pasión, no un curro". Enormes, costosas y prolijas. Así eran ambas banderas, la que estaba del lado de Boca y la que estaba en el sector de River. Las banderas fueron mostradas antes del encuentro y en el entretiempo. Las desplegaban, las dejaban unos minutos y volvían a plegarlas. No hubo cantos ni alguna otra alusión al Grupo Clarín. Estas dos hinchadas, que son portadoras de toda una historia de manfestación de desacuerdos, parecieron unirse en esta expresión.